- La desaparición del Indesol es parte de un proceso de desmantelamiento que busca centralizar las decisiones en México, advirtió la Magdalena García.
VICENTE FLORES HERNÁNDEZ / AGENCIA REFORMA
CIUDAD DE MÉXICO.- La desaparición del Instituto Nacional de Desarrollo Social (Indesol) es parte de un proceso de desmantelamiento del aparato público que busca centralizar las decisiones en México, advirtió la economista Magdalena García.
“Lo que ha habido es un desmantelamiento del aparato público, y un aparato público desmantelado no va a poder hacer nada de lo que se supone debe hacer. No se tiene que concentrar todo.
“Ahora lo pasan a Bienestar; es un retroceso, porque este tipo de políticas, a lo mejor con otro tipo de alcances, existían antes del Indesol, pero si ahora regresamos a lo que era, nos estamos yendo más de 50 años atrás”, sostuvo la especialista, quien colaboró con la dependencia en temas como la evaluación de los proyectos presentados por organizaciones civiles.
Con el decreto del 31 de diciembre pasado, agregó, el Gobierno federal extinguió una institución que había logrado hacer su trabajo de manera impecable, a pesar de que desde el inicio de la actual Administración sufrió recortes de programas y fondos.
Recordó que en 2019 desapareció el Programa de Coinversión Social, que tenía como objetivo el fortalecimiento de las organizaciones civiles a través del financiamiento de proyectos encaminados a atender problemáticas específicas de la población en situación de vulnerabilidad.
García indicó que tras la eliminación de uno de sus programas estrella, el Indesol se quedó con sólo dos: Refugios para Mujeres Víctimas de la Violencia y Apoyos para las Instancias de Mujeres en las Entidades Federativas, este último encaminado a erradicar las causas y todas las manifestaciones de violencia de género.
Lamentó que a pesar de que la institución llevó, de la mano con organizaciones civiles, acciones de política pública a donde el Gobierno no llega, concretó estrategias de coordinación entre los tres niveles de gobierno y mantuvo su trabajo alejado de intereses partidistas, hoy se sume al proceso de desmantelamiento del aparato público.
La economista advirtió que con la desaparición del Indesol no se toma en cuenta el hecho de que las organizaciones civiles especializadas pueden hacer un mejor trabajo, y se destina a la población a tener que recurrir a instancias donde la burocracia es uno de los principales problemas.
El pasado 31 de diciembre se publicó en el Diario Oficial de la Federación el decreto que desaparece el Indesol; en su lugar se crea la Dirección General para el Bienestar y la Cohesión Social.
De acuerdo con el documento, esa nueva dirección estará adscrita a la Secretaría de Bienestar y asumirá las funciones del extinto organismo.
“Los recursos humanos, financieros, materiales, así como los archivos, documentación y acervos bibliográficos del Indesol, serán transferidos a la Dirección General para el Bienestar y la Cohesión Social en un plazo no mayor a 90 días hábiles, contados a partir de la entrada en vigor de este decreto”, señala.
El decreto establece que la nueva dirección general deberá observar todas las disposiciones legales aplicables y respetar los derechos laborales de los trabajadores.
Prevalece incertidumbre por mudanza de Indesol
Entre los empleados del Instituto Nacional de Desarrollo Social (Indesol) prevalece incertidumbre ante el riesgo de ser despedidos y por la falta de información respecto a si tendrán o no que mudarse a Oaxaca, entidad a donde fue trasladada parte de la Secretaría de Bienestar el año pasado como parte de la descentralización de la Administración Pública Federal.
De acuerdo con fuentes de la dependencia, hasta el momento los empleados continúan laborando de manera normal, sin que se hayan registrado despidos. Se sabe que el personal que opera los programas Refugios para Mujeres Víctimas de la Violencia y Apoyos para las Instancias de Mujeres en las Entidades Federativas se adherirán a la Secretaría de Gobernación (Segob), a donde se transferirán ambas estrategias.
Además, señalaron que se prevé que en el estacionamiento del extinto Instituto se construya una sucursal del Banco del Bienestar, pero se desconoce qué sucederá con el edificio que actualmente ocupan y que, desde hace un año comparten con el Instituto Nacional de Economía Social (INAES).
Grupo REFORMA consultó a la Secretaría de Bienestar sobre el lugar desde donde operará la nueva Dirección General para el Bienestar y la Cohesión Social.
Fuentes de la dependencia informaron que la estructura de la dependencia federal, incluida la instancia que sustituye al Indesol, se mudará a Oaxaca.
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