- Para el cultivador de California, las ventas ilegales furtivas ocurren de manera informal, a menudo con un amigo dentro de la comunidad cannábica.
STAFF / LUCES DEL SIGLO
CALIFORNIA, EU.- Expertos de la industria de la mariguana en California aseguran que un número creciente de titulares de licencias están operando en secreto en el mercado ilegal, trabajando en ambos lados de la economía para llegar a fin de mes.
Un productor que opera un cultivo al norte de Sacramento tiene un codiciado permiso emitido por el estado, lo que permite que la empresa elabore y venda sus plantas.
Pero ha sido prácticamente imposible para él obtener ganancias en una industria legal en apuros donde los precios mayoristas de los cogollos de cannabis se han desplomado hasta un 70 por ciento desde hace un año, los impuestos se acercan al 50 por ciento en algunas áreas y los clientes encuentran ofertas mucho mejores en el próspero mercado negro, publicó la agencia AP.
Entonces, las empresas tienen dos identidades: una legal y la otra ilícita.
“Básicamente, subsidiamos nuestro mercado blanco con nuestro mercado negro”, dijo el cultivador, quien accedió a hablar sólo bajo condición de anonimato para evitar un posible enjuiciamiento.
Expertos de la industria dicen que la práctica de trabajar simultáneamente en los mercados legales e ilícitos es demasiado común, una realidad financiera provocada por las dificultades y los costos de hacer negocios con un producto que llaman el más regulado en Estados Unidos.
Para el cultivador de California, las ventas ilegales furtivas ocurren de manera informal, a menudo con un amigo dentro de la comunidad cannábica.
El estado requiere que las empresas legales informen lo que producen y venden, y se ingresa en un vasto sistema de seguimiento computarizado, conocido como monitoreo de “semilla a la venta”, que está lejos de ser hermético.
“No es demasiado difícil operar fuera de las barandillas del sistema de seguimiento”, señaló el productor.
Las plantas pueden variar ampliamente en lo que cada una produce, lo que permite un margen de maniobra en lo que se informa, mientras que hay pocas inspecciones en el sitio para verificar el mantenimiento de registros, apuntó.
El sistema es tan flexible que algunas granjas legales mueven hasta el 90 por ciento de su producto al mercado ilícito, agregó.
Te puede interesar: Proviene de EU 40% de armas en Centroamérica
