Por SALVADOR RAMOS BUSTAMANTE
El 3 de octubre, festejamos en todo el mundo, el 77 aniversario de la fundación de la Federación Sindical Mundial (FSM), recordamos; su presencia, influencia y solidaridad con los obreros, trabajadores y proletarios de nuestro país
En los años 60 del siglo pasado, tuve el privilegio de formarme sindical y políticamente bajo la dirección del maestro Vicente Lombardo Toledano, fundador de la FSM y vicepresidente hasta el año de 1962, cuando se retiró de las tareas sindicales. Desde esa fecha, conocimos y hemos militado en las filas de la FSM.
La Universidad de México VLT y su directora, la maestra Adriana Lombardo Otero, fortalecieron nuestra vinculación con la influencia de la FSM, participando en reuniones nacionales e internacionales, organizadas por sindicalistas para analizar conflictos sociales y políticos.
La Central de Trabajadores de Cuba fue otro de los elementos influyentes con la FSM. Participando en sus congresos, recorriendo América Latina con varios de sus dirigentes, reunidos con otras organizaciones sindicales, clasistas y combativas de nuestro hemisferio; todas militantes o simpatizantes de la FSM.
Organizaciones sindicales mexicanas, dirigentes y personalidades sociales y políticas, asistimos como delegados a congresos de las Uniones Internacionales especializadas en alguna de las ramas sindicales junto a organizaciones de todo el mundo, así como en Congresos de la FSM en la URSS, CUBA Y GRECIA.
Los compañeros del CEPUSTAL, la organización Latinoamericana que sustituyo a la CETAL (Central de trabajadores de América Latina). Roberto Prieto, uruguayo; Antonio López, cubano y otros compañeros y compañeras representándola cuando se instaló en nuestro país, mantuvieron en alto la bandera del sindicalismo clasista y antiimperialista, donde la FSM, estuvo siempre presente con sus orientaciones y su solidaridad.
En nuestro país, en un congreso nacional de la CROC, uno de los dirigentes más destacados, don Manuel Rivera Anaya, planteo la necesidad de que la CROC se incorpore a una organización sindical internacional proponiendo a la Confederación Internacional de Organizaciones Sindicales Libres, de filiación pro yanqui. Los dirigentes sindicales de Quintana Roo, abordamos la tribuna y establecimos nuestro acuerdo en la lucha internacionalista, pero señalamos que había que tener cuidado de no caer en las garras de los enemigos. Proponiendo ingresar a la FSM, explicando el origen y la historia de lucha consecuente y siempre en defensa de los trabajadores y de los pueblos del mundo. Pedimos confrontar las dos visiones y anunciamos una campaña en todo el país, donde difundiríamos toda la información sobre la FSM.
Terminando mi intervención, de regreso al presidium, don Manuel Rivera, me gritó: “váyase con los rusos”, y le respondí: “y usted con los norteamericanos”. Don Manuel era muy respetable, pero se trataba de defender principios y convicciones y tuvimos que debatir con él sobre el tema.
Armamos materiales e iniciamos las discusiones hacia el interior de la central. El comité nacional freno toda actividad y desistió de la afiliación cancelando cualquier afiliación.
Varias de las organizaciones sindicales de la base participamos desde hacía varios años en las actividades de la FSM. Acompañamos a dirigentes de esta organización internacional a encuentros con diversas organizaciones, algunas se reafiliaron, otras, establecieron acuerdos de colaboración y solidaridad.
Tuvimos importantes encuentros con el SME, sindicato UNAM, COR y con La CROC en varios estados. Julio Reyes, Valentín Pacho y otros destacados dirigentes latinoamericanos y de la FSM, fueron respaldados en sus visitas y gestiones en nuestro país.
Viva la FSM, Viva el 77 aniversario de la FSM
