- Daniela Aravedo Vázquez llegó al Congreso con la firme convicción de visibilizar la discriminación de los niños de pueblos originarios y comunidades indígenas.
EDUARDO CEDILLO / AGENCIA REFORMA
CIUDAD DE MÉXICO.- Daniela Aravedo Vázquez llegó al Congreso con la firme convicción de visibilizar la discriminación de los niños de pueblos originarios y comunidades indígenas e intentar erradicarla.
“En lugares públicos somos discriminados por la forma de hablar, por la forma de vestir, por el color de piel, por los hijos de familia con una mayor solvencia económica, por eso invito a todos los que nos están escuchando, diputadas y diputados, a que dejen sus diferencias políticas y que trabajen en favor de las infancias que habitan la CDMX”, expresó en el estrado.
Ayer se realizó el segundo parlamento infantil del Congreso local, en el que participaron 34 menores, 16 niñas y 18 niños, y resaltaron las problemáticas que vislumbran.
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Una de ellas fue Daniela, de 9 años, quien pertenece a una comunidad originaria de Milpa Alta y formó parte de la Mesa Directiva.
“Cualli tonalli (…) yo voy a hablar del tema de la discriminación de los niños de pueblos originarios y comunidades indígenas y quiero resolver ese problema”, resaltó al presentarse.
Daniela y su hermana, Sarah, se inscribieron en este ejercicio, coordinado por la perredista Polimnia Romana, y algunas partes de sus participaciones las enunciaron en Náhuatl.
A las 9:00, los niños recibieron un desayuno, donde se les explicó la dinámica y se votó a los interesados en formar parte de la Mesa Directiva; en ese momento, Sarah ganó la oportunidad de ser la presidenta.
“Yo no busco ser una dictadura ni tampoco ordenar, sino que yo quiero expresarme junto a todos mis compañeros futuros diputados”, argumentó.
Los infantes ingresaron al Pleno y les tomaron protesta en un solo acto para poder comenzar con la dinámica del día: pasaban uno por uno a explicar sus preocupaciones por tres minutos y votaban de manera económica si se aprobaba o no.
El cambio climátio, la violencia, desapariciones, desigualdades sociales, discriminación y hasta ordenamiento territorial fueron parte de su agenda.
Al final del parlamento, la legisladora Polimnia resaltó que, producto de las propuestas de los menores, la comisión trabajará para elaborar iniciativas y puntos de acuerdo que materialicen estas preocupaciones.
“A las niñas y a los niños se les tiene que escuchar todos los días”, puntualizó.
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