- Entre 2006 y 2022, el gasto de los mexicanos en alimentos creció 8.4 por ciento real, principalmente por el consumo de productos procesados.
NALLELY HERNÁNDEZ / AGENCIA REFORMA
CIUDAD DE MÉXICO.- Entre 2006 y 2022, el gasto de los mexicanos en alimentos creció 8.4 por ciento real, principalmente por el consumo de productos procesados y ultraprocesados, informó el Banco de México (Banxico).
En el periodo, el desembolso en alimentos procesados creció 30 por ciento, mientras que en los ultraprocesados, es decir, que no contienen ningún ingrediente fresco, aumentó 20.5 por ciento, de acuerdo con el “Reporte sobre las economías regionales del primer trimestre”.
Además, la población destina cada vez una mayor parte de su presupuesto en comida en comprar alimentos de menor impacto nutrimental.
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Por ejemplo, en el caso de los ultraprocesados, mientras que en 2006 se destinaba 9.6 por ciento del gasto para comida, en 2022 la proporción llegó a 11.6 por ciento, de acuerdo con los cálculos de Banxico.
Mientras que los procesados, aquellos que son transformados para mejorar su sabor, textura o extender su vida útil, alcanzaron casi 30 por ciento del gasto en 2022.
Para el organismo, aumentar el consumo de alimentos ultra procesados no solo es un tema de salud individual por el mayor riesgo de cáncer, diabetes o enfermedades cardiovasculares, sino porque repercute en una menor productividad laboral y en mayor presión al sistema de salud público.
El cambio más drástico se registra en el sur, pues el incremento en el gasto de comida procesadas y ultraprocesada fue de 28.1 por ciento entre 2016 y 2022.
“En todas las regiones disminuyó el consumo de alimentos no procesados y aumentó el de procesados y ultra procesados de 2016 a 2022, excepto en el centro norte, donde el consumo del ultra procesados disminuyó 5.8 por ciento.
“En 2022, la proporción de consumo calórico proveniente de alimentos no procesados, respecto al consumo total, fue mayor en el sur, seguida por el centro, centro norte y norte”, detalló Banxico.
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