- Daños en carreteras, ejidos incomunicados y cientos de familias que claman por apoyo tras perder todo por crecidas de ríos y arroyos.
URIEL VÉLEZ / AGENCIA REFORMA
MONTERREY, NL.- Daños en carreteras, ejidos incomunicados y cientos de familias que claman por apoyo tras perder todo por crecidas de ríos y arroyos, es el panorama que se vive actualmente en los municipios del sur del Estado.
Tras las intensas lluvias registradas del 19 al 21 de junio, el apoyo para la reconstrucción de carreteras y damnificados por inundaciones llega a cuenta gotas en diferentes comunidades de Galeana, Aramberri, Iturbide, Zaragoza, Mier y Noriega y Doctor Arroyo.
Si en la área metropolitana de Monterrey aún se padecen los daños generados por el paso de la tormenta “Alberto”, en el sur de Nuevo León las afectaciones son más visibles todavía.
La situación no luce para nada halagadora en esa región, considerando que el Gobierno estatal ha dado prioridad a las reparaciones en la zona conurbada, especialmente en el Par Vial de Constitución y Morones Prieto.
Además, hay señalamientos de que el Estado ha dado prioridad a la ayuda a municipios gobernados por Movimiento Ciudadano.
En Galeana, en la comunidad de Santa Fe del Ejido Agua Viva, fue uno de los sectores más golpeados por la tormenta.
Alma Nelly López, una de las habitantes del poblado, relató que lo único que recibieron desde hace un mes y medio han sido despensas.
Ella perdió prácticamente todas sus muebles en la inundación de su casa, además de que murieron la mayoría de gallinas, borregos y cerdos que tenían en su pequeña granja.
“Somos muchas familias afectadas todavía”, relató, “nos han apoyado con despensas, se les agradece, pero necesitamos más apoyo para poder seguir adelante.
“Todos aquí en la comunidad perdimos refrigeradores, estufas, colchones y ropa, nos quedamos sin nada”, dijo, “es mucho dinero como para poder nosotros arreglar todo”.
La comunidad de La Poza, a unos 10 minutos de la cabecera municipal, fue otra de las más afectadas y donde más necesidades tienen.
Además, hay carreteras que conducen a ejidos que siguen intransitables y sólo se puede acceder con vehículos todo terreno, como la vía al Encinal.
AÚN ESTÁN INCOMUNICADOS
El desborde del Río Blanco, en la cabecera municipal de Aramberri, dejó innumerables daños y cientos de familias perdieron casi todo su patrimonio.
“Las casas que están por el cauce del río aún están incomunicadas”, reveló una fuente del Municipio, “porque fue mucho lo que el río se llevó de las orillas.
“Y en comunidades de la sierra tenemos aún incomunicadas a La Mora y La Reforma. Se están haciendo trabajos todavía con máquinas para llegar esas comunidades”.
A más de un mes de “Alberto”, las comunidades de Guadalupe de Los Navarro, Guadalupe Victoria, La Angostura, El Rincón, Potrero del Padre y Agua Fría, están prácticamente incomunicadas pues las carreteras están aún con muchos daños.
En la carretera Linares-Iturbide hay tramos de miedo.
Hasta la semana pasada, personal del Gobierno Federal rellenaba con tierra los socavones formados a lo largo de la vía, pero aún hay tramos destruidos y prácticamente sin asfalto.
Trabajadores de la obra revelaron que ni siquiera se ha iniciado el proceso para licitar las obras de reconstrucción de la carretera.
Además hay otras vías en el Municipio de Iturbide que siguen sin ser reparadas.
Jesús Fernando Alonzo, Secretario de Ayuntamiento municipal, señaló que, como medida temporal, se abrieron caminos con maquinaria para que las comunidades no estés incomunicadas.
“Todas las comunidades ya tienen acceso”, dijo, “claro que falta la segunda parte que es el revestimiento para que el camino quede transitable al cien por ciento.
“También tenemos pendiente la reparación del drenaje”, añadió, “se están haciendo los estudios para las reparaciones necesarias”.
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