- Miles de personas formaron con paraguas un arcoíris para buscar el récord de la bandera LGBT+ más grande del mundo; autoridades, reafirman que la capital es una ciudad incluyente.
STAFF / AR
CIUDAD DE MÉXICO.- Cientos de personas con paraguas de colores formaron un arcoíris en el Zócalo capitalino, para buscar el récord de la bandera LGBT+ más grande del mundo.
Los asistentes fueron convocados a las 10:30 horas de este domingo, y desde ese momento y durante una hora se esperó la llegada de participantes, se ensayó la coreografía y se aguardó el arribo de la jefa de Gobierno, Clara Brugada.
Además, hubo quienes llegaban preguntando por el evento y funcionarios capitalinos que invitaron a participar a los paseantes del primer cuadro.
Entre el personal había algunos que solicitaban registrarse antes de recibir el kit conformado por una playera y paraguas, y otros hicieron la entrega del paquete, conforme los interesados se fueron formando.
Hubo también decenas de funcionarios y beneficiarios de programas sociales que acudieron en grupos organizados a la plancha del Zócalo capitalino, después de las 11:00 horas para sumarse al acto.
Con paraguas de colores naranja, amarillo, verde, azul y morado se formaron las filas por bloques, se ensayaron bailes y se dio el movimiento de paraguas a ritmo de la canción “A quién le importa”. Hubo, incluso, algunos que portaban también otros accesorios multicolores.
El área donde se formaron los participantes estuvo rodeada por personal con cuerdas y una veintena de elementos de la secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC).
A las 11:43 horas se inició la actividad con un acto protocolario, cuando llegó la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Clara Brugada, y otras autoridades capitalinas.
En los discursos, las autoridades enfatizaron que la capital del país es una ciudad incluyente.
Clara Brugada comenzó su participación hablando sobre política exterior y calificó de graves los acontecimientos en Medio Oriente.
“Somos y nos declaramos una ciudad pacifista ante los peores momentos que vive el mundo. Condenamos toda forma de violencia, de agresión, de violación a los derechos humanos. Alto inmediato a la guerra”, dijo.
En medio de la guerra y el mes del orgullo, la mandataria de la CDMX remarcó la exigencia de respetar a la otra persona a ser cómo quiera ser y quien quiera ser. “El amor es amor y se respeta”, dijo
“La Ciudad de México es y seguirá siendo la ciudad de los derechos y de las libertades, y que esta imagen monumental que hoy dibujamos con nuestros colores sea también un mensaje poderoso al país y al mundo. La Ciudad de México es capital del orgullo, de la diversidad, de la paz y de la transformación”, abundó.
Según la meta oficial se esperaba la participación de más de 5 mil personas al acto que finalizó después de las 12:30 horas.
Al finalizar la actividad, pese a la lluvia, se formaron filas de visitantes del Centro Histórico que no participaron y a quienes les regalaron decenas de paraguas y playeras que no se utilizaron en la formación de la bandera monumental.