- Las empresas tabacaleras adelantaron que se traduciría en un aumento mínimo de 20 pesos por cajetilla para 2026.
STAFF / LUCES DEL SIGLO
CIUDAD DE MÉXICO.- Ante la propuesta de un incremento del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) superior al 30 por ciento sobre el precio de los cigarros, las empresas que comercializan esos productos adelantaron que se traduciría en un aumento mínimo de 20 pesos por cajetilla para 2026, según un comunicado del Consejo Nacional de la Industria Tabacalera (Conainta).
Esta organización está conformada por Philip Morris México, que vende marcas como Marlboro o Parliament; British American Tobacco, que comercializa Pall Mall, Montana, Boots, entre otras; y Japan Tobacco International, que entre su portafolio tiene Winston y Camel.
En la propuesta también se prevé una cuota específica de 0.6445 centavos vigente en 2025 a 1.1584 pesos por cigarro enajenado o importado que entraría en vigor el 1 de enero de 2030.
Asimismo, se propone introducir un impuesto a la categoría de nicotina con tasa de 200 por ciento.
El Conainta trata de infundir miedo, pues dice que un aumento de esta magnitud resultaría en más marcas ilegales en el mercado, mayor riesgo de consumo en menores de edad, contrabando, extorsión a los pequeños comercios que venden cigarros y, como resultado, menor recaudación a la esperada.
Y otro de sus argumentos para oponerse a este aumento de impuestos es que, dice, la venta de este producto se convertiría en un negocio adicional para las organizaciones criminales.
“De aprobarse esta propuesta de incremento las organizaciones criminales serán los principales vendedores de cigarros en México”, expuso el Conainta.
En un comentario aparte, la firma Consultores Internacionales dijo que el incremento de la cuota del IEPS a bebidas saborizadas y tabacos labrados, podría estimular el comercio informal.
“Este tipo de gravámenes suele ser regresivo, afectando en mayor medida a los hogares de menores ingresos y estimulando el comercio informal, la piratería y el contrabando”, refirió dicha firma.
Afirmó que históricamente, los incrementos de impuestos a los cigarros han demostrado ser ineficaces tanto en la reducción del número de fumadores, como para alcanzar los objetivos de recaudación esperados.
Por ejemplo, dijo, en 2023 la recaudación por IEPS fue de 50 mil 400 millones de pesos; mientras que en 2024 cayó a 46 mil 900 millones, una caída de 7 por ciento, a pesar del incremento en la tasa.
“Estos incrementos no sólo erosionan las finanzas públicas, sino que también propician un alarmante riesgo sanitario relacionado con el crecimiento del mercado ilegal”, reiteró.
El Conainta propuso establecer espacios de diálogo y cooperación para buscar soluciones.
*Con información de Agencia Reforma