- De acuerdo a un seguimiento epidemiológico, se documentó un alza de contagios por coronavirus en la entidad que casi duplica la estadística del último mes de 2020.
MARCO ANTONIO BARRERA
CANCÚN, Q. ROO.- Los reiterados llamados del gobernador Carlos Joaquín para evitar relajar los protocolos y los hábitos de higiene contra el Covid-19 obedecieron a que la entidad reflejó un incremento sostenido de casos al final del año pasado.
De acuerdo al seguimiento epidemiológico de la Secretaría de Salud federal se documentó un alza de contagios por coronavirus en la entidad que casi duplicó la estadística del último mes de 2020, en contraste con el anterior.
A pesar de que el momento más álgido de la pandemia en Quintana Roo ocurrió el julio pasado al contabilizarse tres mil 644 casos de contagios reportados, en los siguientes cuatro meses la cifra disminuyó paulatinamente hasta llegar a 882 el pasado noviembre.
Fue cuando el Ejecutivo estatal advirtió que sería lamentable que el estado, para entonces en semáforo epidemiológico amarillo, regresara al color naranja, cuya situación se presagió en la semana del 22 al 28 de noviembre luego de confirmarse 336 casos, más del doble de los registrados los siete días anteriores que sumaron 152.
Pero la cifra creció un caso de contagio más la semana siguiente (337) y se insistió que se actuara con prudencia para contener un eventual rebrote.
A pesar de que en la segunda semana de diciembre la cifra disminuyó a 267 casos, la que subió a 356 semanales, lo que se reflejó en los nuevos llamados para evitar a toda costa reuniones por las festividades. Del 20 al 26, en plenas fiestas, la cifra fue de 306 casos confirmados, que siguió creciendo en los siguientes siete días al repuntar a 331 casos positivos del coronavirus.
El alza de casos activos siguió nuevamente a principios de año, al llegar a mil 837 hasta el día 23 (igual que en septiembre pasado), lo que obligó al decreto de medidas adicionales para romper la cadena de contagio que se mantenían en una tendencia alcista. Fue un momento crucial, las medidas sanitarias ya no eran opcionales sino obligatorias.
Los presagios se cumplieron cuando el mandatario anunció que la zona norte (incluido Cancún) retornó al semáforo epidemiológico naranja a partir del día 25 de enero, mientras que la zona sur se mantuvo al límite del color amarillo, muy cerca, casi al límite de retroceder, aunque todavía sin cambio.
La actualización de los colores frente a la pandemia es un ejercicio científico que identifica variables sustentadas en hechos, de ahí que se ha reiterado el evitar el incremento sostenido de contagios para caer en un nuevo estado de alerta y regresar al confinamiento.
De acuerdo al Geoportal Público Covid-19 del Gobierno del Estado de Quintana Roo, hay nueve colonias de Cancún y ocho de Chetumal que están en color rojo y naranja del semáforo epidemiológico.
Los casos positivos activos en el municipio de Benito Juárez se concentran en Prado Norte (11), Villas del Mar (10), Paseo de las Palmas (9), Paseos del Mar, Región 105-Tierra Maya y Hacienda del Caribe (8), Paraíso Maya (7), Región 95 y Región 96 (6).
El mismo reporte señala que hasta ayer, en Chetumal se identificó los mayores casos en los centros habitacionales Adolfo López Mateos (18), Proterritorio (12), Forjadores (9), Centro (8), Maya Real (7) y Caribe, Payo Obispo y Campestre (6).
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