- Descarta Barclays que inflación en México alcance el doble dígito, estiman que PIB alcance el 2 por ciento; destacan bajo nivel de la deuda.
AZUCENA VÁSQUEZ / AGENCIA REFORMA
CIUDAD DE MÉXICO.- México atravesará por un periodo de estanflación “light”, que implica un crecimiento económico menor al de años anteriores y una inflación por arriba de las estimaciones del banco central, un fenómeno que se presentará en todo el mundo, señaló Barclays.
Gabriel Casillas, economista en jefe para Latinoamérica de Barclays —empresa líder en servicios financieros a nivel mundial—, explicó que la estanflación es la combinación de crecimiento económico cero y una inflación de doble dígito; sin embargo, aún no se llega a una inflación de esa magnitud.
“El mundo, conforme a la Reserva Federal de Estados (Fed) está siendo más gradual; no están subiendo las tasas de manera así tan rápida, vamos a lo que yo llamo una estanflación ‘light’, y México va a tener que vivir eso”, declaró en conferencia donde presentó las perspectivas económicas de Barclays para el país.
Refirió que la compañía tiene estimado que el Producto Interno Bruto (PIB) de México crecerá este año 2 por ciento, una proyección por arriba de la de algunos analistas, que consideran que será de 1.2 por ciento.
“¿Por qué estamos un poquito más optimistas que el resto? Porque México está creciendo. No hubo un paquete de estímulos fiscales para paliar la pandemia, pero el mundo está viendo con buenos ojos hoy que la deuda no se eleve”, indicó.
Casillas aseveró que la inflación de México, que en mayo fue de 7.65 por ciento a tasa anual, es consecuencia, casi en su totalidad, de efectos externos.
“La inflación es casi toda importada. Sí hay una parte de inflación del lado de la demanda aquí, pero es una parte menor, que son los precios de gasolinas, materias primas, granos, alimentos, que ha hecho que esté en lugares que no veíamos desde el 2001”, dijo.
En ese sentido, Casillas reconoció al actual gobierno por impulsar el Paquete Contra la Inflación y la Carestía (Pacic), donde la parte más importante, dijo, son los subsidios a las gasolinas y el diésel.
“Si no hubieran puesto el puro subsidio, estaríamos hablando de una inflación directa de 9.7 por ciento. Se han criticado un poco los subsidios, a mí no me gustan los subsidios en lo particular, pero en las circunstancias en las que estamos, y la forma en como se ha hecho, yo creo que es la correcta en este momento”, señaló.
Sobre el comportamiento de la inflación, Casillas aseveró que tocó su pico en la primera quincena de abril, por lo que empezará a “bajar”, aunque todavía no es tan evidente.
Agregó que la estimación de Barclays es que la inflación sea de 6.8 por ciento al cierre de este año y que la tasa del Banco de México llegue a 9 por ciento, con aumentos de 50 puntos base.
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