- El área metropolitana de Monterrey apenas está entrando a la etapa “más critica” de la crisis por la sequía.
URIEL VÉLEZ – ÁNGEL CHARLES / AGENCIA REFORMA
MONTERREY, NL.- Después de meses de racionar el agua y de desabasto en diversos sectores de la ciudad, el área metropolitana de Monterrey apenas está entrando a la etapa “más critica” de la crisis por la sequía, advirtió ayer la Comisión Nacional del Agua (Conagua).
En entrevista, Luis Carlos Alatorre, director regional del organismo, señaló que la presa Cerro Prieto está prácticamente seca y sin la capacidad de aportar agua, por lo que la ciudad padecerá un déficit de alrededor del 35 por ciento del líquido que requiere.
Por separado, Agua y Drenaje (AyD) estimó ayer que Cerro Prieto dejaría de dar agua este mismo viernes.
Aunque había la esperanza de que los pozos compensaran la pérdida de las presas Cerro Prieto y La Boca, que también está agonizando, los resultados no fueron las esperados, lamentó el funcionario.
La crisis se agrava además por las altas temperaturas por la canícula y con un pronostico de lluvias que está 35 por ciento por abajo del promedio histórico en julio.
“La situación más critica la estamos viviendo en este momento”, afirmó Alatorre, “Para Conagua, la presa Cerro Prieto técnicamente ya se terminó”.
De los 16 mil litros por segundo que requiere Monterrey, precisó el directivo, sólo se podrán suministrar unos 10.5 mil litros, es decir, un déficit de 5.5 mil litros o el 35 por ciento.
“Habrá sectores que no tendrán un suministro continuo de agua”, señaló.
Los sectores más afectados serán la zona norte y norponiente de la zona metropolitana, que forman parte de los municipios de García y Monterrey.
En tanto, en rueda de prensa, el director de AyD, Juan Ignacio Barragán, dijo que Cerro Prieto se secaría para el viernes y la situación ya se está reflejando en tanques vacíos.
“Las próximas dos semanas van a ser bastante difíciles con suministro reducido en temporada de fuerte calor”, señaló Barragán, quien pidió solidaridad a la población especialmente entre el 15 al 27 de julio.
“Estamos en una situación crítica”, reiteró el funcionario estatal, que añadió que esperan que la incorporación de agua del sector agropecuario y de otras fuentes ayuden a la Ciudad.
A su vez, Alatorre lanzó un llamado a los cámaras industriales para que cedan cuanto antes los pozos que ya habían acordado donar e incorporarlos a la red de suministro.
Para el directivo de la Conagua, hay tres factores que provocaron la crisis de agua en Nuevo León.
El primero es el factor político, explicó Alatorre, ya que ninguna Administración consideró impulsar los proyectos contemplados para garantizar el suministro a la población a largo plazo, como construir un segundo acueducto en la presa El Cuchillo.
“El tema se ha politizado”, lamentó. “La parte política no deja tomar las riendas a la parte técnica. No es cierto que no hubiera planificación”.
También afectó el rápido aumento de la población en la zona metropolitana y que en los últimos seis años se han registrado lluvias por debajo del promedio.
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