- Se registran retrasos en la construcción de la terminal del tren interurbano, adjunta al Metro Observatorio, por la caída de una dovela.
IVÁN SOSA / AGENCIA REFORMA
CIUDAD DE MÉXICO.- Desalojar la maquinaria que colapsó el 17 de abril en las obras del Tren México-Toluca retrasará aún más los trabajos que en julio cumplirán 10 años.
La armadora, conocida como lanzadora de dovelas, continúa en el suelo de la Presa Tacubaya y, de acuerdo con trabajadores, es la misma inestabilidad del suelo de esa zona la que complica su extracción.
Para retirar el equipo de 800 toneladas será necesario armar una plataforma provisional encima del cuerpo de agua, sobre ésta deberán maniobrar las grúas que levanten las piezas de la lanzadora.
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“Una cosa son los dictámenes para que el seguro responda por la lanzadora siniestrada y otra, más difícil, es la ingeniería para levantarla”, indicó uno de los trabajadores.
Debido al rechazo de los vecinos del Pueblo de Santa Fe, el trayecto fue reubicado de Avenida Vasco de Quiroga hacia la barranca del Río Tacubaya, la cual desciende a la presa.
En medio de la cañada, dentro del Campo Militar 1-F, se edifica un puente atirantado diseñado para evitar que las columnas del viaducto elevado fueran ancladas sobre manantiales y árboles del río.
En este tramo, contiguo a la Cuarta Sección del Bosque de Chapultepec, también hubo un siniestro, con una persona fallecida. Retrasos se registran por igual en torno a la construcción de la terminal del tren, adjunta al Metro Observatorio, en donde permanecen los daños del derrumbe de una dovela en enero.
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