- Nueve niños han logrado tocar la campana, como símbolo emotivo de que vencieron a la enfermedad, en lo que va de 2025, con el apoyo de la Asociación Mexicana de Ayuda a Niños con Cáncer en Quintana Roo.
OMAR ROMERO
CANCÚN, Q. ROO.- Al haber terminado el tratamiento contra el cáncer, nueve niños lograron tocar la campana, un símbolo emotivo de que dieron la batalla y vencieron a la enfermedad.
Los menores de edad pasaron a una nueva etapa de seguimiento médico, para erradicar sospechas de la efectividad de los procedimientos contra las células que se convirtieron en cancerosas en sus cuerpos.
La presidenta de la Asociación Mexicana de Ayuda a Niños con Cáncer (Amanc) en Quintana Roo, Paulina Castillo, informó que dos pequeñas, Laura y Jimena, hicieron sonar la campana.
El acto simbólico se dio después de haber superado un proceso largo de quimioterapia en la lucha contra la enfermedad, la cual puede ser curable si se detecta a tiempo.
La asociación comenzó operaciones en el estado hace casi seis años, y desde entonces tiene un registro de 37 niños que han llegado a este momento de vida, según la organización que presentó su informe 2024.
De la cifra mencionada, nueve han vivido ese momento representativo en lo que va de 2025, lo que representa un avance positivo en la lucha contra el cáncer infantil.
“Nos hacen comprobar que la lucha sí se vence, sí puede y que la razón de existir vale la pena. Es una cifra muy importante (nueve este año)”, expresó.
Contra la enfermedad se recibe tratamiento durante dos años y medio aproximadamente, de ahí cuando se logra superar prosigue la etapa de vigilancia. Precisamente, cuando se toca la campana es la transición a una nueva oportunidad de vida , como lo experimentaron los menores vencedores.
Paulina Castillo explicó que el momento del sonido significa que el niño está libre de la enfermedad, aunque todavía debe mantenerse en vigilancia por los cinco años siguientes, para asegurar que el cáncer no regrese.
En este periodo de observación, quienes han logrado sobreponerse al padecimiento ya no reciben quimioterapia, aunque continúan con ciertos cuidados.
Una vez que transcurre ese lustro sin reportar recaídas, se considera que la enfermedad ha sido superada completamente, y se abre una nueva etapa de vida para los que llegan a ese momento.
Según la explicación de especialistas, el padecimiento ya no regresa a los cuerpos de los pequeños sobrevivientes, y pueden continuar hacia adelante.
La Amanc Quintana Roo atiende a 100 menores en tratamiento médico, de los cuales 26 presentan tumores sólidos y 77 algún tipo de leucemia.
Según el informe de la organización, la mayoría de los casos proviene de la zona norte del estado de Quintana Roo, en la franja geográfica en la que se incluyen destinos como Cancún, isla Mujeres, Puerto Morelos y Playa del Carmen, entre otros.
El año pasado, la asociación brindó apoyos invaluables a las familias, en los que se incluyeron tratamientos médicos, insumos hospitalarios, despensas y medicamentos oncológicos.
Igualmente, estudios clínicos, transporte, viáticos para traslados, gastos funerarios y trasplantes.