- Dedica Danny Ocean su nuevo disco, ‘Babylon Club’, al placer de la vida y la felicidad.
STAFF / AR
CIUDAD DE MÉXICO.- “Tus canciones se sienten como la playa”, le han dicho frecuentemente a Danny Ocean por temas como “Me Rehúso”, pero en su nuevo disco, Babylon Club, abrazó aún más esa idea al crear un material con sabor a sal, arena y amor.
Parte de su esencia como caribeño incluye la cercanía a la costa, ya que en su natal Venezuela vivía a unos 30 minutos del mar, donde siempre fue feliz.
Con esa sensación, el músico, de 33 años, quiso reconectar mediante sus nuevas composiciones, que trabajó mientras pensaba con añoranza en Playa Ermitaño, República Dominicana.
“Esto no es un disco como los anteriores, que ha nacido a raíz de conceptos o conversaciones. Es una invitación a darte cuenta de que la vida es hermosa, que la vida es una sola, que mereces ir a la playa y darte ese tiempo a ti mismo.
“Es este lugar donde todos queremos ser, sin ser juzgados, amar, respetar, estar con la gente que uno quiere y ya”, compartió Ocean, en entrevista.
Que la guía del proyecto se base en el disfrute y la relajación no es gratuito, sino un mensaje que el intérprete de “Mónaco” debía darse a sí mismo.
El cantante registra 29 millones de oyentes mensuales en Spotify, lo que evidencia un éxito que lo ha mantenido entre giras y compromisos laborales, por lo que ha tenido que recordar sus prioridades.
“Había pasado muchos años trabajando, y me agarró una gira el año pasado en Estados Unidos cuando yo sólo estaba pensando en la playa, en querer escaparme y darme cuenta de la vida, más allá de tus éxitos profesionales y ese furor de querer triunfar.
“También es darte ese espacio, ese amor propio y recordar que la vida había sido muy hermosa conmigo. Ha sido un poquito reconectar con ese feeling de agradecimiento”, dijo.
Los ritmos del disco, describe el músico, son muy tropicales, por lo que no sólo incluyó reguetón, sino también elementos del merengue, salsa, afro y hasta un tipo de flamenco que a él mismo le cuesta clasificar.
Otras estrellas del urbano, como Rosalía, Bad Bunny, Karol G y Rauw Alejandro, también le han dado un lugar preferente a esos estilos, algo que le suena lógico a Ocean.
“Uno no puede escaparse del lugar de donde es. Esa es la realidad: o lo abrazas y vas aprendiendo con él o lo dejas a un lado y a ver qué tal te va, pero uno no puede escapar realmente. En mi disco hay muchos géneros, pero lo hago a mi estilo y visión”, remarcó.
Para lograrlo tuvo distintos colaboradores. Su trabajo con Kapo en “Imagínate”, track que abre el disco, dibujó el rumbo del proyecto, al cual se integraron también El Alfa, Arcángel, Aitana, Louis BPM, Kenia Os y Sech.
Ocean sabe que además del elemento artístico, la música es un negocio con muchos intereses, y más en las cifras virales en las que él se mueve, pero se siente agradecido porque considera que ha sabido manejarse en ese escenario.
“Mi música siempre ha sido muy libre y he sido muy afortunado de que la gente pueda conectar también con el arte que presento, porque ellos son los que me han permitido seguir siendo libre”, sostuvo.
Babylon Club ya está disponible en plataformas.