- La renovación de la Línea 1 del Metro se retrasó y no mejoró la frecuencia de trenes.
STAFF / AR
CIUDAD DE MÉXICO.- Las obras de renovación de la Línea 1 del Metro no sólo incumplieron con las fechas de entrega que estaban previstas en su arranque, sino también la promesa de mejorar la frecuencia en el paso de convoyes.
El contrato para la modernización de trenes, sistema de control y vías establecía que el objetivo de los trabajos, que concluyeron con 27 meses de retraso, era mejorar la capacidad de transporte de la Línea Rosa, la más antigua del Sistema de Transporte Colectivo (STC).
El documento marcaba que se requería que el ramal tuviera un “intervalo práctico no mayor a 100 segundos”, es decir, que se registrara el paso de convoyes por cada minuto por cuarenta segundos.
Sin embargo, en un ejercicio realizado por REFORMA en la hora pico de la mañana, se contabilizaron 19 trenes por cada hora, es decir, que el intervalo por cada convoy que pasa es, en promedio, de 189 segundos, lo que representa 89 por ciento más del tiempo que se había prometido.
El paso de convoyes, no obstante, no es estable. En algunos casos llegó a extenderse hasta 4 minutos con 50 segundos y, en otros, ocurrió en un minuto con un segundo.
Fernando Baltazar es uno de los usuarios de la línea que comenzó a operar de nuevo el mes pasado. Reconoce que hay mejora en las instalaciones, pero señala que por las tardes siguen registrándose aglomeraciones.
“Está muy moderna, los vagones ya no son cajas cerradas, se puede uno distribuir, aunque le sirve más a los vendedores, aun así en la tarde tengo que esperar dos, tres trenes para entrar y todo apretado, nada diferente a como estaba”, mencionó.




