- Las denuncias por robo de hidrocarburo reportaron un incremento del 148 por ciento de enero a junio de 2025 respecto a 2024.
STAFF / AR
CIUDAD DE MÉXICO.- Las denuncias por robo de hidrocarburo, tanto el que se realiza por toma clandestina y sin toma clandestina, reportaron un incremento del 148 por ciento de enero a junio de 2025 respecto a 2024.
Esto aun cuando Pemex reporta una baja en el número de tomas clandestinas físicas localizadas en ductos.
De acuerdo con un anexo oficial de la empresa, en 2024 se reportaron mil 818 denuncias por tomas clandestinas (un promedio de 151.5 al mes) y en 2025, tan sólo en el primer semestre, suman dos mil 259 (un promedio de 376.5 al mes), casi 2.5 veces más.
En el rubro de robo de hidrocarburo sin toma clandestina, el promedio mensual pasó de 3.5 casos en 2024 a 8 en lo que va de este año.
“La información proporcionada es la que se encuentra registrada en los Sistemas Jurídicos Institucionales, la responsabilidad en el registro de la información concierne y es exclusiva de los abogados a quienes se les asignan los asuntos”, precisó Pemex.
Fuentes de seguridad de Pemex comentaron que la aparente paradoja, de más denuncias y menos tomas detectadas, se explica por una mayor actividad ministerial y de inteligencia en torno a las cadenas de suministro.
Por presión operativa en zonas críticas y un cambio en las acciones delictivas que, ante la vigilancia en ductos, se diversifican a modalidades menos visibles o a esquemas de comercialización y acopio, como el huachicol fiscal.
En lo que va del año, Hidalgo continúa como el epicentro nacional del robo de hidrocarburos en su modalidad de tomas clandestinas, al concentrar 460 denuncias presentadas ante la Fiscalía General de la República (FGR), de acuerdo con datos oficiales.
Le siguen Puebla, con 395 denuncias; estado de México, con 273 reportes; Guanajuato, con 264; Nuevo León, con 220, y Tamaulipas con 163.
Autoridades indicaron que el corredor que atraviesa Tula de Allende, Cuautepec, Tlaxcoapan y Tlahuelilpan, en Hidalgo, continúa siendo el más conflictivo del país.
Las autoridades atribuyen esta concentración al trazado estratégico de ductos de Pemex, particularmente el Tula-Azcapotzalco y el Tula-Salamanca.
Además de la persistencia de redes locales de extracción y comercialización ilícita, y la intervención de organizaciones criminales como el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) y el Cártel de Santa Rosa de Lima.
A pesar del despliegue de fuerzas federales y estatales desde 2019, el número de carpetas abiertas en Hidalgo es superior al promedio nacional.
Apenas en agosto, autoridades aseguraron un predio en el municipio de Atotonilco de Tula, donde se incautaron 15 tanques cisterna, más de 26 mil litros de combustible robado, así como vehículos y droga.
En junio, una importante red de huachicol del clan de Cirio Sergio Rebollo Mendoza “Don Checo”, fue detectada en Querétaro, Hidalgo, estado de México y Ciudad de México, y fue desmantelada con saldo de 32 detenidos.