- El presidente de la Amatur, Sergio González, urgió a estimular la inversión y fortalecer la competitividad del país.
OMAR ROMERO
CANCÚN, Q. ROO. – Ante la creciente competencia de otros destinos del Caribe y la compleja relación comercial con los Estados Unidos, el sector turístico mexicano urgió la creación de incentivos fiscales que estimulen la inversión y fortalezcan la competitividad del país.
El presidente de la Asociación Mexicana de Agencias de Turismo Receptivo (Amatur), Sergio González Rubiera, lamentó la ausencia de políticas públicas que favorezcan al desarrollo turístico.
Igualmente, criticó las recientes reformas fiscales aprobadas por el Congreso federal, las cuales, dijo, van en sentido contrario al crecimiento del sector.
“Las decisiones que se están tomando no incentivan, sino que desincentivan la inversión. En lugar de promover el turismo, se están incrementando impuestos y derechos que encarecen el destino”.
El empresario propuso una agenda de estímulos fiscales que permita atraer capital y generar empleo, como la exención o reducción del Impuesto sobre la Renta (ISR) durante varios años para quienes inviertan en infraestructura hotelera, parques temáticos o servicios de transporte turístico
Además, planteó mejorar la deducibilidad de gastos en restaurantes y servicios turísticos, con el fin de dinamizar el consumo interno, y apoyar el turismo comunitario, permitiendo que pequeños emprendimientos locales gocen de beneficios fiscales iniciales.
“Si una comunidad construye cabañas o un restaurante de bajo impacto, sería un gran estímulo decirles que los primeros cinco años no pagarán ISR. Eso sí incentiva el turismo, no las medidas actuales”.
Señaló que las autoridades estatales y federales han optado por aumentar cargas impositivas como el Derecho de No Residente (DNR) y las tarifas de acceso a zonas arqueológicas, medidas que reducen la competitividad de México frente a otros países.
Comparó la situación nacional con la que vive Panamá, donde existen leyes específicas de fomento al turismo.
“Mientras otros países ofrecen incentivos, nosotros encarecemos los viajes. México carece de un marco legal que promueva la inversión y la expansión de proyectos turísticos”.
A pesar del entorno fiscal adverso, González Rubiera se mostró optimista sobre el futuro del turismo en Quintana Roo en 2026, destacando su infraestructura consolidada y su cercanía con los Estados Unidos.
No obstante, consideró urgente atender otros factores que frenan la competitividad, como la lentitud de los procesos aduanales y migratorios, la piratería en servicios turísticos y la necesidad de mejorar las infraestructuras logísticas en aeropuertos y zonas de conexión.
El representante empresarial hizo un llamado a recuperar la promoción turística como prioridad nacional, advirtiendo que los recortes presupuestales bajo criterios de austeridad ponen en riesgo el posicionamiento internacional del país.




