- Ante la complejidad para atender los derrames producto de tomas clandestinas de turbosina en GAM, Pemex suspendió temporalmente el ducto que transporta este tipo de combustible.
SELENE VELASCO / AGENCIA REFORMA
CIUDAD DE MÉXICO.- Ante la complejidad para atender los derrames producto de tomas clandestinas de turbosina en GAM, Petróleos Mexicanos (Pemex) suspendió temporalmente el ducto que transporta este tipo de combustible.
Myriam Urzúa, secretaria de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil de la CDMX, reconoció ayer ante vecinos que no hay fecha para limpiar el suelo impregnado con hidrocarburo, por lo que el aroma persistirá. Mientras tanto, aseguró que la paraestatal aceptó cerrar suministro subterráneo.
“Pemex por supuesto inmediatamente lo hizo, cortar el flujo de producto desde la terminal de Azcapotzalco hasta el Aeropuerto, ya no hay, lo único que queda en el tubo es lo que quedaba, que va a ir saliendo en algún momento, pero eso es lo único que queda de producto, ya está cortando el flujo”, destacó.
- Cámara Baja saca a México de Comando Norte
- Favorece Corte de EU a Donald Trump
- Preocupa a líderes europeos condición de Joe Biden
Las medidas para suplir dicho abasto, dijo, corresponderá tomarlas a la petrolera.
“A través de pipas o de otra forma, pero eso ya es un tema de Pemex directamente”, dijo.
La de ayer volvió a ser una reunión tensa con residentes de las colonias Cuchilla del Tesoro, Narciso Bassols y CTM Aragón, aledañas al Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) y en donde desde febrero comenzó a notarse un fuerte olor a combustible en el alcantarillado.
Urzúa, quien semanas atrás había calculado que la limpieza tomaría 15 días, ayer dio un panorama muy diferente… y nada sencillo. Insistió en que la zona es registra de forma persistente pinchazos para robar combustible.
Sólo en territorio de la CDMX fueron ubicadas tres tomas clandestinas, pero a estas se deben sumarse cinco intentos más en otros puntos, donde no se realizó la conexión completa para el hurto, pero sí se provocaron derrames.
“Trataron de picar, no pudieron completamente, pero por ese lugar empieza a salir producto y empieza a contaminar el suelo”, explicó.
Vecinos volvieron a reclamar que pasen las semanas y no reduzca el tufo, con las respectivas afectaciones a la salud.
La funcionaria aseguró que la lluvia aumenta el olor en las zonas donde la tierra está contaminada, pero que antes de sustituirla -como ya se había anunciado- deben conocer la dimensión de la afectación… y para eso no hay fecha todavía.
“Tiene que haber un estudio de remediación del suelo, que nos tiene que decir cuánto del suelo está contaminado, hasta donde está contaminado. Después de tener ese estudio hay que hacer, hay que contratar, Pemex seguramente lo va a contratar, hay que hacer un contrato para que saquen todo ese suelo contaminado, se vayan haciendo muestras en cada lugar donde se está excavando hasta que salga cero”, explicó.
Te puede interesar: A trabajar, llueve o truene
