- El gobierno de China reaccionó con furia ante el plan de Estados Unidos para revocar las visas de estudiantes chinos.
STAFF / LUCES DEL SIGLO
BEIJING, CHINA.- El gobierno de China reaccionó con furia ante el plan de Estados Unidos para revocar las visas de estudiantes chinos, y calificó la medida del presidente Donald Trump contra estudiantes extranjeros como “política y discriminatoria”.
“Estados Unidos quiere revocar de manera irracional las visas de los estudiantes chinos bajo el pretexto de ideología y (protección de) los derechos nacionales”, declaró Mao Ning, portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China en una conferencia de prensa.
“Esta práctica política y discriminatoria de Estados Unidos ha expuesto las mentiras de la supuesta libertad y apertura que Estados Unidos siempre ha promocionado, y ha dañado aún más su propia imagen internacional, imagen nacional y credibilidad”.
La administración de Trump anunció el miércoles que eliminará permisos para estudiantes chinos, que son una de las mayores fuentes de ingresos para las universidades estadounidenses, en su último ataque contra la educación superior en ese país.
Estados Unidos también revisará los criterios de visa para endurecer los controles sobre todas las futuras solicitudes de China y Hong Kong, dijo el secretario de Estado Marco Rubio.
La portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores Mao Ning calificó como “irracional” esta decisión.
Rubio redobló su apuesta en tomar medidas contra alumnos extranjeros después de que China criticara su decisión de suspender temporalmente la tramitación de visas de estudiantes de todo el mundo.
Antes de estas acciones, la administración de Trump ya había buscado terminar con el permiso para todos los estudiantes extranjeros en la Universidad de Harvard, que rechaza de plano la presión del presidente.
Los estudiantes chinos, que pagan matrículas de decenas de miles de dólares, constituyen una de las fuentes de ingresos más importantes para las universidades estadounidenses.
*Con información de la agencia AFP