- Una electrolinera en Coyoacán ha sido suspendida dos veces por infringir el uso de suelo.
STAFF / AR
CIUDAD DE MÉXICO.- Una electrolinera en Coyoacán ha sido suspendida dos veces por infringir el uso de suelo, pero los vecinos temen que los encargados vuelvan a violar los sellos para echar a andar el generador a diesel con el que activan los centros de carga.
Este método lo utilizan debido a que el establecimiento, de nombre City Energy, carece de un contrato con la Comisión Federal de Electricidad (CFE). Los trabajadores han dicho que la generadora es de uso temporal, sólo mientras se regularizan.
Cuando el alternador se pone en marcha provoca ruido y humo. Además, el combustible que se abastece a través de pipas es almacenado en contenedores de plástico.
Los habitantes de la Colonia Atlántida, donde se ubica, denunciaron que el negocio ha operado de manera irregular desde marzo, sin exhibir los permisos.
La Alcaldía suspendió en mayo el establecimiento, pero los sellos fueron quebrantados para que siguieran recibiendo clientes, detallaron.
Apenas el 9 de julio, la Procuraduría Ambiental y del Ordenamiento Territorial (PAOT) volvió a suspender el lugar, pero horas más tarde los dueños taparon los sellos para organizar una fiesta de “inauguración oficial”.
En el festejo recibieron clientes, fueron ingresados automóviles nuevos y lanzaron pirotecnia, pese a que cerca hay torres eléctricas de CFE.
La zonificación del predio donde está la electrolinera es habitacional, con máximo dos niveles, además de que no permite giros comerciales como el de City Energy.
“Este giro no tiene ningún permiso, lo cual PAOT ya nos ha confirmado, no tiene permiso emitido por la Seduvi, por ninguna autoridad, o sea, están operando ilegalmente”, comentó Laura Castillo, integrante de la Comisión de Participación Comunitaria (Copaco) de Atlántida.
Agregó que los empleados cargaban los automóviles eléctricos aún cuando el negocio estaba en proceso de construcción.
“Ruido excesivo por su generador de electricidad para abastecer las estaciones de carga y el humo que emana el regenerador, mucho humo, o sea, es una contaminación tremenda, todo el día huele a humo aquí en la calle.
“Y el ruido, las 24 horas, que no deja dormir a la gente (…). No estamos en contra de que pongan empresas, pero que cumplan con la reglamentación, porque es excesivo el ruido que genera”, remarcó el vecino Antonio Serna, quien vive frente al negocio irregular.
El martes, seguían colocados los sellos que impuso PAOT y un trabajador aseguró que no estaban recibiendo clientes debido a la sanción de la que fueron objeto.