- El FC Barcelona fue exhibido por el Chelsea en la Champions League, sufriendo una goleada de 3-0 que le resultó barata.
STAFF / AR
CIUDAD DE MÉXICO.- El FC Barcelona tuvo una noche muy triste en Stamford Bridge.
El conjunto blaugrana fue exhibido por el Chelsea en la Champions League, sufriendo una goleada de 3-0 que le resultó barata.
Nada le salió bien a los dirigidos por Hansi Flick, víctimas del inteligente plan de juego y dinámica que propuso la escuadra Blue en Inglaterra.
Los de Enzo Maresca no dejaron respirar ni un momento a los jugadores culés, ejercieron presión en todos los sectores del campo y cortaron los circuitos de pase de un equipo que sufre cuando no puede salir de su cancha con el balón controlado.
Y, a partir de ese dominio desde lo físico, Chelsea mostró contundencia para aprovechar los errores defensivos blaugranas.
Porque una vez más, el Barcelona se disparó en su propio pie en Champions, con un autogol de Jules Koundé al 27′ y la expulsión de Ronald Araujo al 44′.
El defensor uruguayo se ha acostumbrado a ser el gran villano culé en los momentos importantes y ayer volvió a demostrarlo, recibiendo dos tarjetas amarillas infantiles, primero por reclamar al árbitro y luego por cortar un avance rival.
Con ello, el dominio inglés se hizo aún más notorio y los locales liquidaron la victoria con los tantos de Estevao al 55′ y Liam Delap al 73′.
Y lo peor para el Barsa es que el contundente descalabro pudo haber sido mucho peor, pues les fueron anulados tres goles en contra y su arquero Joan García tuvo al menos dos atajadas importantes.
Ahora, los culés ya pusieron en predicamentos su clasificación directa a Octavos, pues con solo 7 puntos en la posición 15, deberán cerrar de manera perfecta las últimas tres fechas de la Fase de Liga para intentar colarse entre los ocho primeros.




