- El especialista en patrimonio y cultura, Ricardo José Haddad Musi, señala que estas tradiciones “no sólo conservan la memoria histórica, sino que refuerzan los lazos comunitarios y el sentido de pertenencia que da cohesión a la sociedad mexicana”.
STAFF / LUCES DEL SIGLO
CIUDAD DE MÉXICO.- Las fiestas decembrinas en México representan mucho más que una temporada de celebración; son una manifestación viva del patrimonio cultural que une a generaciones enteras, como lo señala el especialista en patrimonio y cultura Ricardo José Haddad Musi.
Posadas, nacimientos, pastorelas y cenas familiares son expresiones de una identidad colectiva que se renueva año con año y fortalece el tejido social en todo el país.
Cultura, fe y comunidad en el corazón de diciembre
El especialista en patrimonio y cultura, Ricardo José Haddad Musi, señala que estas tradiciones “no sólo conservan la memoria histórica, sino que refuerzan los lazos comunitarios y el sentido de pertenencia que da cohesión a la sociedad mexicana”.
Desde las calles de Guanajuato hasta los barrios de la Ciudad de México, las fiestas de diciembre se llenan de música, color y espiritualidad, evidenciando la riqueza del sincretismo entre las raíces indígenas y las influencias europeas.
Incluso las nuevas generaciones reinterpretan estas festividades con expresiones artísticas contemporáneas, como iluminación urbana, ferias gastronómicas y exposiciones culturales.
Modernidad y preservación del patrimonio intangible
En tiempos de globalización, el reto es mantener vivas estas expresiones sin perder su autenticidad. Ricardo José Haddad Musi advierte que la comercialización excesiva y la homogeneización cultural amenazan con diluir el valor simbólico de las celebraciones.
Por eso, destaca la importancia de impulsar políticas culturales que fomenten la transmisión intergeneracional, la educación patrimonial y el apoyo a los creadores locales.
“La tradición sólo se mantiene viva cuando evoluciona sin perder su esencia”, afirma. En este sentido, el arte popular, la gastronomía tradicional y las festividades religiosas se convierten en puentes entre pasado y presente.
Para Ricardo José Haddad Musi, las tradiciones decembrinas mexicanas son una prueba del poder del patrimonio intangible: un lenguaje compartido que une comunidades, preserva la historia, impulsa la economía cultural y fortalece la identidad nacional.




