- Las sanciones aplicadas a empresas obedecen al incumplimiento del manejo integral de residuos en Quintana Roo.
OMAR ROMERO
CANCÚN, Q. ROO.- Las sanciones ambientales aplicadas recientemente a empresas en Quintana Roo obedecen al incumplimiento de disposiciones relacionadas con el manejo integral de residuos, y están lejos de estar dirigidas de manera específica al uso de plásticos de un solo uso.
El procurador de Protección al Ambiente del Estado, Alonso Fernández Lemmen Meyer, explicó que se han enfocado en poner en la mira a los grandes generadores de residuos, que por ley están obligados a contar con un plan de manejo autorizado.
En el documento se debe detallar de forma clara el proceso que siguen los desechos, desde su generación hasta su disposición final, incluyendo la forma en que se manejan internamente.
Igualmente, se debe señalar a la persona responsable de su recolección, si el acopiador cuenta con la autorización de la Secretaría de Ecología y Medio Ambiente y el destino final de los residuos.
El servidor público precisó que entre los sectores económicos sujetos a revisión y sancionados están empresas relacionadas con el manejo de neumáticos.
Igualmente, de electrodomésticos, plásticos, aceites usados, cristales y productos farmacéuticos.
Las actividades enlistadas están consideradas como generadoras de residuos que requieren un tratamiento especial, dado su impacto ambiental.
El procurador ambiental señaló que se ha detectado entre el sector empresarial un desconocimiento de las obligaciones ambientales vigentes, más que una resistencia deliberada por incumplir con la normativa.
Ante esta situación, se ha optado por impulsar procesos de regularización, y se ha dado orientación a las empresas para que puedan cumplir adecuadamente con la ley.
En administraciones anteriores, recordó, el manejo de residuos no figuraba como una prioridad en las políticas públicas del estado.
En la gestión actual, resaltó, la gestión de protección ambiental y el tratamiento adecuado de los residuos sólidos ocupan un lugar central en la agenda gubernamental, como parte de la estrategia integral para preservar los recursos naturales.
Fernández Lemmen Meyer enfatizó que la economía de Quintana Roo depende en gran medida de la conservación de su entorno natural, y es precisamente este patrimonio ambiental el que sustenta la actividad turística, como el motor económico principal de la entidad.
Por ello, reiteró la importancia de reforzar la vigilancia y fomentar el cumplimiento de la normatividad para que se garantice la protección de los ecosistemas a largo plazo.




