Inteligencia Artificial y grupos criminales
JOSÉ RÉYEZ
Los sistemas de Inteligencia Artificial (IA) están siendo utilizados y explotados en beneficio del crimen organizado en América Latina sin la necesidad de contar con habilidades o destrezas técnicas avanzadas, refiere el informe 2024 Inteligencia Artificial y crimen organizado, financiado por la Unión Europea.
Los delincuentes pueden utilizar la IA para facilitar y potenciar sus ataques maximizando las oportunidades de obtener beneficios en un menor tiempo, explotando nuevas víctimas y creando modelos de negocio delictivos más innovadores, al tiempo que reducen las posibilidades de ser atrapados.
Por ejemplo, la automatización de ataques mediante el uso de bots controlados por IA que tienen la capacidad de potenciar sus actividades a gran escala, tales como ataques de denegación de servicio (DDOS), la propagación y distribución de programas maliciosos (malware), la identificación de imágenes en redes sociales para explotar a víctimas de tráfico de personas o cometer delitos de abuso y explotación sexual.
La creación de correos phishing con mayor precisión y con la posibilidad de adaptarlos a las características específicas de sus víctimas, automatización de falsedades documentales, violaciones masivas de la propiedad intelectual e industrial, utilizar técnicas manipulativas para persuadir a personas en los derechos fundamentales de las partes en el proceso penal, entre otras.
La información que se aporta es una fotografía del momento actual que debe ser interpretada como tal ya que la tecnología de IA evoluciona muy rápidamente y algunas herramientas, sistemas o aplicaciones desarrolladas y mencionadas en el estudio pueden quedar obsoletas en cuestión de pocos años o incluso meses. Además, las tendencias criminales varían mucho de país en país e incluso entre regiones y subregiones.
No obstante, se puede esperar que el uso de herramientas de IA por parte de los grupos de delincuencia organizada (GDO), particularmente de las redes criminales de alto riesgo (HRCN, por sus siglas en inglés), vaya en aumento, incluso en algunos casos su uso aumente exponencialmente en los próximos años.
Analizar conductas no deseadas, incluso intentar influir en un proceso electoral o engañar al juez con pruebas falsas en un juicio, o el uso de deepfakes para suplantar la identidad de sus víctimas para posteriormente cometer delitos de extorsión y fraude.
Todas estas conductas y vectores presentan retos y oportunidades que las autoridades del sistema de justicia deben abordar y explorar para poder ofrecer respuestas concretas a las víctimas de este tipo de delitos.
La inteligencia artificial (IA) ha transformado múltiples sectores de la sociedad global, proporcionando nuevas oportunidades para el desarrollo económico y social, así como desafíos importantes, especialmente en la lucha contra el crimen organizado, advierte el informe.
Esta adopción tecnológica plantea nuevas dificultades para las fuerzas del orden, que ya enfrentan recursos limitados y estructuras institucionales frágiles en varios países de la región.
La IA ha introducido nuevas modalidades de delitos que van más allá de las prácticas tradicionales. Por ejemplo, Europol ha señalado el modelo de Crime-as-a-Service (CaaS), el cual permite que criminales sin experiencia técnica accedan a herramientas sofisticadas en el submundo digital, aumentando su capacidad para realizar ataques complejos.
Los cárteles de la droga en México, por ejemplo, han empezado a utilizar drones controlados por IA no sólo para transportar drogas, sino también para realizar ataques físicos contra miembros de otros cárteles o para interrumpir cadenas de suministro rivales.
Estos drones se han convertido en una herramienta fundamental para el contrabando, permitiendo el cruce de fronteras con mayor facilidad y evitando los controles de seguridad convencionales. En muchos casos, estos drones operan de manera autónoma, por lo que se les ha denominado “las nuevas mulas de drogas”.
La carrera armamentística protagonizada por grupos criminales ha adquirido otro nivel en México. El CJNG cuenta con una división especializada en el manejo de aeronaves no tripuladas, advierte InSight Crime.
Autodenominados como los “Operadores Droneros”, esta unidad militar utiliza un parche con su nombre y las siglas del CJNG, que los distingue como los especialistas en el uso de drones.
De acuerdo con una reciente investigación de InSight Crime, el empleo de artefactos explosivos improvisados como los que se instalan en los drones, están concentrados en los estados de Michoacán, Chihuahua y Guanajuato.
En abril de 2024, el CJNG intensificó sus ataques en Michoacán, empleando drones para lanzar artefactos explosivos con sustancias químicas en su interior. De acuerdo con los habitantes afectados, las bombas emitieron gases con efectos sobre las vías respiratorias.
La IA también está transformando la forma en que los cárteles optimizan sus rutas de contrabando. Mediante modelos de aprendizaje automático, los cárteles pueden analizar datos de rutas, horarios de patrullas fronterizas y métodos de envío para prever los mejores momentos y ubicaciones para transportar drogas, reduciendo el riesgo de detección.
Además, el uso de sistemas de reconocimiento facial ha permitido a los cárteles identificar a agentes encubiertos, lo que complica aún más los esfuerzos de las autoridades para infiltrarse en estas organizaciones.
Otras formas en que los grupos criminales utilizan la IA incluyen la explotación de imágenes satelitales de plataformas como Google Earth para planificar rutas de contrabando con precisión, monitoreo a tiempo real de los movimientos de las fuerzas y cuerpos de seguridad y la manipulación de redes sociales a través de minería de datos y generación automática de contenido, herramientas que les permiten gestionar sus operaciones de manera más eficiente.
De manera similar a las empresas legítimas, las organizaciones criminales emplean la IA para la gestión de la cadena de suministro y para la mitigación de riesgos. La capacidad de la IA para predecir vulnerabilidades también ha sido utilizada en esquemas de chantaje, extorsión y difamación.
Los crímenes tradicionales como la extorsión y el terrorismo ahora se llevan a cabo con nuevos métodos, incluyendo la generación automática de contenido, lo que facilita la creación de pornografía infantil y la manipulación de redes sociales para influir en la opinión pública y defender los intereses del crimen organizado.
Los criminales también han comenzado a desarrollar su propio software de IA, empleando modelos sin restricciones para generar malware como el ransomware, que cifra datos y exige rescates.
A medida que las organizaciones criminales en América Latina continúan adoptando la IA, las formas tradicionales de delitos como el tráfico de drogas, el contrabando de armas y el lavado de dinero se están transformando.
Por otro lado, la optimización de fraudes financieros también ha sido facilitada por la IA. Casos como los deepfakes y la automatización de estafas mediante chatbots han permitido a los criminales ampliar el alcance de sus actividades.
Estos chatbots, como el LoveGPT, son capaces de generar conversaciones automáticas en aplicaciones de citas para estafar emocionalmente a las víctimas, pidiendo dinero bajo falsas emergencias o presentando oportunidades de inversión fraudulentas. este tipo de fraude demuestra la capacidad de la IA no sólo para automatizar procesos, sino para hacerlo a una escala que hubiera sido imposible sin la intervención de la tecnología.
Además, algunos de los grupos criminales más poderosos de América Latina, como el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) en México y el Primeiro Comando da Capital (PCC) en Brasil, están involucrados en este tipo de fraudes, lo que sugiere que la tecnología no está limitada a grupos pequeños, sino que también es empleada por grandes organizaciones delictivas.
Desde el uso de deepfakes y drones hasta la optimización de fraudes y la creación de malware, la IA ha permitido a las organizaciones criminales evolucionar y aumentar su alcance de maneras sin precedentes.
Principales delitos cometidos utilizando herramientas de IA
En el caso específico del crimen organizado, sus grandes facilidades de financiación eliminarán cualquier barrera económica que pueda limitar la integración de la IA en los procedimientos criminales.
Hemos sido testigos de este tipo de episodios en los que las nuevas tecnologías son empleadas de formas muy eficientes por el crimen organizado, es el caso, por ejemplo, del aprovechamiento que han hecho de las tecnologías criptográficas para garantizar el secreto de sus comunicaciones con plataformas cifradas como ENCROCHAT o SKYECC.
Otro factor que, sin duda, dinamizará la integración de la IA en los procedimientos criminales es la falta de sujeción por su parte a cualquier tipo de normativa legal que se establezca a nivel nacional o internacional para evitar los efectos nocivos de esta tecnología.
Es de esperar, por tanto, que el grado y el ritmo al que la IA se incorpore a los procedimientos empleados por el crimen organizado suponga un reto extraordinario para la sociedad y, en especial, para las autoridades y organismos encargados de la lucha activa contra esta lacra.
El cibercrimen es uno de los ámbitos más afectados por la adopción de IA. Se usan algoritmos avanzados para automatizar ataques como el phishing y el fraude financiero o bancario.
El reporte de Interpol sobre Evaluación del fraude financiero, indica que ha habido casos recientes en países miembros de ese organismo en los que se han generado fotografías deepfake para abrir cuentas bancarias en línea con el fin de expandir las redes de muleros que prestan sus servicios al crimen organizado.
Dicho reporte señala que existe evidencia reciente de que grupos criminales latinoamericanos como Commando Vermelho, Primeiro Comando da Capital (PCC) y Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) de México están involucrados en la comisión de fraude financiero.
El lavado de dinero mediante el empleo de IA también está a la orden, permitiendo a las organizaciones criminales ocultar el origen ilícito de sus ingresos mediante transacciones automatizadas y complejas redes financieras que evaden los controles tradicionales.
Organizaciones criminales en la región utilizan herramientas de IA para crear audios y videos falsos convincentes, imitando voces o imágenes de familiares de las víctimas. Esta tecnología ha sido usada para cometer fraudes y extorsiones.
Herramientas de IA también han sido empleadas para cometer estafas relacionadas con migrantes desaparecidos, los criminales generan imágenes falsas de sus víctimas para convencer a sus familiares o parientes de que han sido secuestrados a cambio de obtener el pago de rescates.
En la frontera entre EE.UU. y México se reporta que grupos criminales utilizan y manipulan imágenes para estafar a las familias de migrantes desaparecidos.
Los delincuentes están utilizando modelos avanzados de IA basados en ChatGPT y chatbots similares para generar correos electrónicos y mensajes de texto de phishing más convincentes y a gran escala, lo que permite que los ataques de ingeniería social dirigidos a víctimas sean más sofisticados y difíciles de detectar.
De acuerdo con la empresa de seguridad Keeper se ha observado un aumento de 51% en ataques de phishing impulsados por la IA. Ejemplos se pueden encontrar en FraudGTP y Metasploit.
La IA también está revolucionando el tráfico de personas, particularmente en el reclutamiento y explotación de víctimas a través de plataformas digitales. Las redes criminales utilizan IA para identificar a personas vulnerables y dirigirse a ellas con mayor precisión, explotando patrones de comportamiento online tal y como se manifiesta en varios informes recientes sobre trata de personas en Europa de UNODC.