- Mara Lezama afirmó que su gobierno aceptó el reto y que va por buen camino.
STAFF / LUCES DEL SIGLO
CHETUMAL, Q. ROO.- Para recuperar la paz y tranquilidad en Quintana Roo, algo que parecía imposible, sólo se requiere más trabajo, porque no hay atajos posibles, y se va por el camino correcto, afirmó la gobernadora Mara Lezama Espinosa.
La mandataria estatal sostuvo que la construcción de paz no es fácil y que lleva tiempo, pero su gobierno aceptó el reto, y se hizo de lo imposible lo cotidiano.
“Tres años después, lo que parecía un sueño, empieza a ser realidad”, mencionó.
Como parte de la difusión de su Tercer Informe, expuso que el camino es tener una Policía moderna, más capacitada y cercana a las personas. Igualmente, una Fiscalía eficiente que dé respuestas contundentes, un trabajo en equipo con las fuerzas federales, y un gobierno decidido a una lucha frontal contra la corrupción.
En Quintana Roo, destacó, los logros alcanzados en materia de seguridad y construcción de paz hablan por sí mismos, como la disminución de los homicidios dolosos en 61.3 por ciento, la vinculación a proceso del 94 por ciento de los delincuentes detenidos por delitos de alto impacto, y la obtención de sentencias condenatorias de 490 delincuentes con hasta 70 años de prisión.
Igualmente, en el último año se detuvo a 39 objetivos prioritarios por ser generadores de violencia y a 204 extorsionadores, de los que el 90 por ciento están vinculados a proceso con sentencias de hasta 37 años de cárcel.
Otros hechos relevantes, comentó, han sido 381 cateos con decomisos importantes de armas y drogas, y el rescate de 439 víctimas de trata y la aprehensión de 26 tratantes.
La primera autoridad estatal reconoció que uno de los temas que más interesan a la sociedad es el de la seguridad, que se fue deteriorando con el paso de los años.
“Por una terrible apatía, por desidia, por graves omisiones de servidores públicos que abandonaron al pueblo y propiciaron el fortalecimiento de las bandas criminales.
“Ahora, la historia es diferente. En nuestro gobierno decidimos hacerle frente a la situación, sin excusas, sin discursos vacíos”.
Lezama Espinosa afirmó que la construcción de paz es una decisión política que requiere no solo de voluntad, sino también de coraje.
Además de continuar atacando los orígenes de la violencia y atendiendo las causas sociales, se tomaron decisiones firmes en materia de seguridad y procuración de justicia.
Se destinó, dijo, una inversión histórica para adquirir más cámaras de videovigilancia y se sumaron más de 2 mil cámaras de empresas y de la ciudadanía al monitoreo del Centro de Comando, Control, Cómputo, Comunicaciones y Contacto (C5)
Igualmente, se construyeron los Centros de mando del Centro de Control y Comando (C2) en los municipios de Felipe Carrillo Puerto, Bacalar, José María Morelos y Lázaro Cárdenas, y está por concluir el de la Zona Hotelera de Cancún.
Además, se modernizó y fortaleció los C2 de Cozumel, Chetumal y Puerto Morelos, a lo que se suma la construcción (con fondos municipales) del de Tulum.
Se construyó el C2 de la Zona Continental de Isla Mujeres, con la aportación estatal de puntos de monitoreo, cámaras, sistema de despacho asistido por computadoras y otras herramientas para su funcionamiento.
Se creó también el Grupo Centurión especializado para atender y combatir el delito de extorsión, cuyos resultados son extraordinarios, dijo.
Otras acciones implementadas se dirigieron a la Fiscalía General del Estado (FGE) de Quintana Roo, cuya tarea es fundamental en la construcción de paz, cuya institución estaba abandonada y con carencias.
En ese proceso de saneamiento se dio de baja a más de 500 elementos, “que tomaron el camino incorrecto”.
Para fortalecer la infraestructura, abundó, un par de elefantes blancos se transformaron en instalaciones dignas y útiles para la ciudadanía, como son las nuevas fiscalías La Ceiba y Distrito Norte en Benito Juárez, esta última en construcción.
A la par se invierte en tecnología en investigación e inteligencia, que son fundamentales para combatir la delincuencia, y hay más arcos de seguridad, más patrullas, una red de comunicación, equipamiento, tecnología e investigación.




