- Organizaciones de la sociedad civil, especialistas en salud mental y familias afectadas pidieron una atención urgente al problema del suicidio en la entidad, que lidera la estadística en el mapa nacional.
IGNACIO CANUL
MÉRIDA, YUC.- Con la finalidad de crear conciencia entre la sociedad sobre la grave crisis de salud pública que sitúa a la entidad yucateca en el primer lugar nacional en suicidios, organizaciones de la sociedad, especialistas en salud mental y familias afectadas exigieron que se ponga más atención al creciente problema en la región.
En la antesala del Día Mundial para la Prevención del Suicidio que se conmemora el 10 de septiembre, decenas de personas salieron a las calles para participar en una marcha de El Remate al Monumento a la Patria.
La Asociación Yucateca de Suicidología (en referencia a la ciencia que estudia los comportamientos, pensamientos y sentimientos autodestructivos), organizadora de la marcha, dio a conocer cifras alarmantes que sitúan al estado en el primer lugar nacional en muertes por suicidio.
La realidad que se vive en Yucatán es que el 30.1 por ciento de las muertes violentas fueron por suicidio, cuya tasa triplica la media nacional del 10.6 por ciento.
La estadística contrasta significativamente con otras entidades como Guerrero, que registró el 2.1 por ciento, según datos de 2024.
En el contexto nacional, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) reportó cerca de 9 mil suicidios en México el año pasado, lo que destaca la urgencia de fortalecer las estrategias de prevención en los ámbitos local y federal.
Los especialistas participantes en la protesta enfatizaron que el suicidio es un problema complejo y multifactorial que requiere una atención integral y coordinada.
Como parte de las acciones emprendidas para abordar esta problemática, se anunció un foro con expertos, investigadores y colectivos para este miércoles en que se conmemora el Día Mundial para la Prevención del Suicidio.
Igualmente, anunciaron que se presentará una iniciativa de ley para impulsar y fortalecer las políticas públicas de prevención, y garantizar un acceso más amplio a los servicios de salud mental en el estado.




